El presidente dijo que el manejo de los conflictos fue responsabilidad de los gobernadores Axel Kicillof y Gustavo Bordet. Cuestionó a los medios y elogió a Juan Grabois.
l presidente Alberto Fernández se refirió este viernes 30 de octubre al conflicto de toma de tierras en Guernica, provincia de Buenos Aires —que se resolvió con un violento desalojo este jueves— y la disputa familiar de los Etchevehere en Entre Ríos, que derivó en un fallo judicial contra Dolores Etchevehere y su posterior detención. El jefe de Estado aseguró que en ambos casos «los conflictos se resolvieron respetando el juego de las instituciones» y responsabilizó a los gobernadores Axel Kicillof y Gustavo Bordet por su resolución, aunque elogió el manejo que hicieron del tema. «Lo ocurrido ayer en Guernica fue producto del accionar policial dispuesto por la Justicia. Previo a ello hubo un enorme trabajo de reubicación de familias realizadas por el Ministro (de Desarrollo de la Comunidad bonaerense) Andrés Larroque. El gobernador Kicillof tuvo la prudencia de mantenerme informado», escribió el primer mandatario en su cuenta de Twitter en la mañana de este viernes.
Alberto Fernández también se pronunció sobre el conflicto sucesorio por Casa Nueva, que enfrentó a Dolores Etchevehere con sus hermanos, Luis Miguel (exministro de Agricultura de Mauricio Macri), Sebastián, Juan Diego y su madre, Leonor Barbero Marcial. El líder del Frente de Todos insistió que que se originaron en «una disputa familiar», como sostuvo el oficialismo pese al involucramiento de Juan Grabois y funcionarias nacionales como Victoria Donda.
«Fueron también resultado del accionar policial dispuesto por la justicia local tras el fracaso de la conciliación entre las partes. También aquí el gobernador Bordet me mantuvo permanentemente informado», agregó el presidente.
Críticas a los medios El jefe de Estado luego cuestionó un artículo periodístico que le atribuía el manejo de ambos temas. Se trata de una nota de Román Lejtman en Infobae, que aseguraba que «Alberto Fernández no confía en Sergio Berni y agotó el chat y el celular de Axel Kicillof para definir la operación de desalojo de las tierras ocupadas en Guernica». «El involucramiento que me atribuye la nota adjunta en tales sucesos no es tal», sostuvo el mandatario. «Obviamente, como Presidente de la Nación, estoy atento a todo lo que ocurre en nuestro país. Pero como somos un Estado Federal este tipo de conflicto son resueltos por los gobiernos provinciales», agregó. «Dicho esto, ambos gobiernos debieron enfrentar situaciones críticas en donde se mezclaron necesidades humanas, disputas familiares y también intencionalidades políticas. A mi juicio, los conflictos se resolvieron respetando el juego de las instituciones que la República impone», continuó el presidente. Por último, Alberto Fernández redobló sus críticas: «La necesidad de cierta prensa de insinuar fisuras o contradicciones políticas en un momento en que la Argentina exige el máximo del esfuerzo mancomunado, en nada ayuda a la acción de gobierno», completó. Elogios a Grabois Alberto Fernández también elogió a Juan Grabois, abogado defensor de Dolores Etchevehere, y negó que estuviera ocupando el campo de Casa Nueva en disputa, ya que llegaron a la propiedad de la mano de una de las presuntas dueñas. «No lo estaban ocupando, porque la verdad es que él (por Grabois) estaba recibiendo un campo de alguien que se lo cedía», remarcó el presidente, entrevistado esta mañana por Gustavo Sylvestre en Radio 10. insistió en que «había un conflicto familiar de intereses que complicó todo». Sobre el problema del déficit habitacional, el jefe de Estado consideró que «el método no es ocupar campos» y que eso «Grabois también lo tiene claro». Sin embargo, valoró la «idea base» del dirigente social ligado al Papa Francisco de «buscar tierras fueras de los centros urbanos para que la gente se asiente y las explote».
«Es una idea a tener en cuenta. No es descabellada. Es para volver a recuperar la habitabilidad del campo», opinó, y agregó que «detrás del planteo de Grabois hay algo serio, hay algo razonable, algo para discutir». «La producción de cultivos como la soja desempleó cada vez más gente en los campos y generó hacinamiento en zonas urbanas», argumentó Fernández, reforzando la idea del líder del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE). En este sentido, el mandatario sostuvo que hay «muchas tierras del Estado » que podrían «entregarse a quienes quieran realmente producirlas en un tiempo en el que hay una vocación social de volver a lo ecológico, la producción sin riesgo contaminante de herbicidas y demás». «Lo estuve hablando con el gobernador de Entre Ríos (Bordet), ver cómo podemos empezar a pensar soluciones de ese tipo que sirven y permiten sacar a la gente del hacinamiento de zonas híper pobladas como el Gran Buenos Aires, Rosario, Córdoba, Bariloche, y darles tierras para que produzcan algo que hoy también es socialmente muy demandado, el alimento producido ecológicamente, sin agrotóxicos», reveló. «Son todas cosas que se podrían hacer y tienen un mercado y le permitirían a la gente vivir dignamente», concluyó.
Fuente: Perfil