Pero lo cierto es que, en un día más que complicado para el gobierno español, su presidente en funciones, Pedro Sánchez, recibió en su despacho del Palacio de La Moncloa al candidato del Frente para Todos, Alberto Fernández.
Con más de media hora de atraso sobre la previsión inicial, la reunión comenzó pasadas las 13.30 (las 8.30 en Buenos Aires) en el edificio presidencial del complejo situado en las afueras de Madrid.
Se trató de un encuentro privado, por lo que no hubo prensa para seguir la llegada del exjefe de gabinete a la ajardinada sede del ejecutivo español.
La reunión se concretó a pedido de Fernández. En su transcurso estaba previsto que ambos dirigentes «intercambien opiniones» sobre la relación bilateral, según indicó La Moncloa.
Tensa jornada
Para el momento de recibir a Fernández, la agenda del líder socialista desbordaba. Todos sus ministros estuvieron en el mismo complejo. Los había convocado para ajustar en conjunto el plan de emergencia ante un probable divorcio inamistoso entre Gran Bretaña y la Unión Europea.
En la misma mañana, una renovada diferencia con la izquierda radical de Podemos volvía a acercar al socialista la posibilidad de un nuevo llamado a elecciones generales en España.Eso pasará si para dentro de poco más de dos semanas, Sánchez no logra los votos para ser investido presidente por el Congreso.
La mañana no podía haber estado más exigente para el momento en el que Fernández ingresó al complejo presidencial.
Por ser un encuentro privado no se pudo apreciar el saludo inicial entre ambos. Ni tampoco el momento en que el visitante recorrió los metros hasta la escalinata en la que esperaba su anfitrión.
Una caminata que, a su manera, permite repasar las huellas que dejaron quienes ejercieron la presidencia con anterioridad. Por un lado, están los ejemplares de bonsái que sobrevivieron tras el paso del ex presidente Felipe González, entusiasta cultor de esa práctica botánica, y las enormes pinturas de escuela abstracta y moderna con que se decoró la sede durante la presidencia del conservador Mariano Rajoy.
Sin declaración conjunta
Al tratarse de una reunión privada, no fueron previstas declaraciones ni comunicación oficial alguna al término del encuentro.
Luego de la visita a Sánchez, el exjefe de gabinete tiene otra cita de las mismas características de reserva con el ex presidente José Luis Rodríguez Zapatero. Sólo que esta vez, alrededor de una mesa de almuerzo.
Más tarde, Fernández fijará posición sobre el acuerdo entre la Unión Europea y el Mercosur en una conferencia «magistral» en el Congreso de los Diputados. La agenda cerrará con una cena privada con empresarios.
Fuente: lanacion.com.ar